Concha Diez-Madroñero: 'Disfrutar el éxito de un cliente satisfecho no tiene precio'
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Concha Diez-Madroñero Estilistas, sito en Don Benito, Extremadura, es un salón con estilo, mucho estilo, que marca tendencia.
Y lo hace desde todas las perspectivas posibles. Incluidas sus áreas perfectamente separadas y su decoración pulcra, al detalle y a la última, pasando por sus servicios y atención al cliente, y por supuesto, finalizando en el equipo que allí trabaja y en su gerente, impulsora y fundadora, Concha, una mujer de bandera, peluquera de hecho, por convicción y pasión; simpática, amable, divertida y sobre todo vivaz, al día, dispuesta y comprometida.
Más de 120 metros cuadrados, estandarte de estilo y belleza. Clientes fieles y satisfechos y una filosofía, desde siempre, estar en vanguardia. "Trabajamos para que nuestros clientes descubran las posibilidades que puede alcanzar su cabello con la aplicación de novedosas terapias y la última tecnología", dice Concha.
Hoy toda la belleza que le rodea, incluida la suya propia, se convierten en hilo conductor, protagonista de nuestra nueva historia, esta entrevista. La de una profesional sin cortapisas que ha conseguido destacar por encima del resto y hacer de su sueño, su empresa.
Ella es Concha Diez-Madroñero. O como su cuenta de Instagram indica, en un juego de palabras y guiño a su propio apellido, 'Concha 10': @concha_diez_madronero.
Como peluquera tengo la gran suerte de disfrutar absolutamente de todos los trabajos, desde una terapia en el 'Care Bar', pasando por el momento delicado del corte a un niño o bebé, a la exquisitez de peinar y vestir a una novia.
Beauty Market.: ¿Cómo se pone en marcha un salón de peluquería de las características del tuyo propio?
Concha Diez-Madroñero: Todo empieza tras mi formación y experiencia académica, por las ganas que tenía de trabajar directamente con los clientes, sin intermediarios; de realizar un servicio completo yo misma, bajo mi responsabilidad, de aportarles mis ideas y de mimar su cabello. Sí (exclama con ilusión en los ojos Concha, esta extremeña, mujer peluquera a más señas). Anteriormente a tener mi salón, trabajaba en una academia de peluquería, impartía clases teóricas y prácticas, estuve cinco años intensos y fui muy feliz porque me encanta preparar, formar y compartir conocimientos. Pero, en medio de esas jornadas de trabajo entre un alumno y otro y un cliente y tres más, me dije a mí misma: ¿si lo que me gusta, es más, me encanta, es hacer un servicio de principio a fin, y aquí no lo hago, ¿por qué no montar mi propio salón? Y así tomé la decisión con el apoyo incondicional de mi marido, he de decir, que me ayudó en todo momento.
B.M.: ¿Fue difícil?
C.D.M.: No, no fue difícil porque se va haciendo poco a poco con la fuerza que te aporta la ilusión de estar haciendo lo que realmente quiero.
B.M.: ¿Cómo se mantiene un salón y se logra el éxito?
C.D.M.: Un salón se mantiene no perdiendo nunca las ganas de trabajar del primer día. Para lograr el éxito mi idea está en pensar que aún no lo he conseguido y actúo en consecuencia para llegar a él.
B.M.: ¿Cómo es tu salón, la peluquería que haces...?¿Tienes un sello propio?
C.D.M.: El salón Concha Diez-Madroñero es un salón concepto donde además de estar dividido en zonas de trabajo cuenta con un personal especializado en cada área. Nuestro concepto está basado en cuidar del cliente dentro y fuera del salón, haciendo un seguimiento de cada servicio realizado para asegurarnos que se cumplen las expectativas que nos demanda, y le damos las pautas para cuidar su cabello en casa y que puedan sacarle el máximo partido en su día a día. Mi manera de vivir la peluquería y de sentir la cultura de mi salón me concede el beneficio de tener una identidad propia.
Nuestros clientes eligen el salón Concha Diez-Madroñero porque confían plenamente en que siempre se les va a realizar un trabajo de calidad, con un buen producto, buenas profesionales con una gran actitud.
B.M.: ¿Por qué te escogen tus clientes?
C.D.M.: Nuestros clientes eligen el salón Concha Diez-Madroñero porque confían plenamente en que siempre se les va a realizar un trabajo de calidad, con un buen producto, buenas profesionales con una gran actitud, siempre dispuesta y dispuestas a aportar cualquier punto de mejora en todos los sentidos.
B.M.: ¿Qué es lo que más te gusta hacer como profesional peluquera, corte, color, diagnóstico...?
C.D.M.: Como peluquera tengo la gran suerte de disfrutar absolutamente de todos los trabajos, desde una terapia en el "Care Bar", pasando por el momento delicado del corte a un niño o bebé, a la exquisitez de peinar y vestir a una novia. Me gusta todo (hace un gesto de reafirmación y felicidad con las manos y la sonrisa), pero sin lugar a dudas os diré que lo que más, lo que más me gusta es escuchar al cliente para tener claro lo que demanda y así poder complacerle. Disfrutar el éxito de un cliente satisfecho no tiene precio.
B.M.: ¿Qué es el diagnóstico en el salón de peluquería?
C.D.M.: Diagnosticar es hacer el estudio completo del cabello, analizar cuál es su estado, ver de dónde parte y a dónde queremos llegar para conseguir lo que el cliente nos demanda, si el diagnóstico es perfecto el tratamiento será el ideal y el resultado el óptimo.
B.M.: ¿El cliente compra cosmética capilar en el salón o aún le resulta difícil?¿Por qué crees que no lo hace mayoritariamente en el salón y acude todavía al super o perfumerías?
C.D.M.: Un porcentaje alto de clientes nos compra producto en el salón, ha sido el beneficio de educarlos en la importancia de cuidar sus cabellos para conseguir los resultados de las imágenes que nos demandan. Detrás de la foto de cabello bonito que ellos y ellas nos enseñan hay una serie de tratamientos que no se ven pero que sin no estuvieran no sería posible lucir esos looks tan espectaculares. Lo difícil es concienciar al cliente de la importancia de los ingredientes que ponen en su cabello y de ser asesorados por personas cualificadas que les dirán en cada situación o estación del año lo que su pelo necesita. El cliente, si no tiene esa cultura de cuidado seguirá comprando por su cuenta en el súper o dejándose influenciar por sus ídolos del momento. Uno de nuestros objetivos es conquistar a nuestros clientes haciéndoles fans de nuestra marca y convertirnos, para una gran mayoría de personas, en su principal referente.
Mi mente es inquieta y no deja de dar vueltas buscando inspiración para crear moda, desarrollar ideas de corte y color que favorezcan y fusionen con las tendencias de ropas del momento.
B.M.: ¿Cómo definirías al cosmético capilar perfecto?
C.D.M.: El cosmético capilar perfecto se define como un producto diseñado para que funcione correctamente, cumpliendo con el objetivo para el que está recomendado. Es fundamental que se vuelva esencial para el consumidor.
B.M.: ¿Las españolas y españoles en general acuden todo lo que debieran a la peluquería?
C.D.M.: La gran mayoría de las personas no visitan el salón como deberían. Normalmente lo hacen más por estética que por cuidado. Quieren corte, color, forma, pero no sienten la necesidad de mantener su pelo perfecto con visitas frecuentes al salón entre un servicio y otro. Eso es lo que tenemos que corregir.
B.M.: ¿Cuántas personas componen tu equipo?¿Cómo es tu relación con ellas?
C.D.M.: Mi equipo es la herramienta más valiosa que yo tengo, ellas, son todas mujeres, hacen camino conmigo y juntas tenemos un gran recorrido. Es un equipo veterano que llevan conmigo mucho tiempo, más de la mitad fueron alumnas de la academia donde yo trabajaba, la relación que mantengo con ellas es de familia, de compañeras. Nos hemos visto crecer tanto profesional como personalmente, nos entendemos en una distancia muy corta en la que sabemos solucionar cualquier incidencia con respeto, cariño y sabiendo pedir perdón.
B.M.: ¿Y cómo haces posible el entendimiento con tu equipo, que sea la extensión de tus manos?
C.D.M.: Me atrevo a decir que la parte equipo es la más compleja, no nos preparan para ello y día a día te vas encontrando con situaciones que pueden derivar en conflictos si careces de empatía, diplomacia, paciencia y el mejor de los dones, que para mí es el de la oportunidad y el de ser agradecido, lo que te acerca a las personas porque sabes en qué momento debes decir las cosas. Ser agradecido siempre es un acierto porque nos hace sentirnos mejor. Estos principios me van bien y sin darnos cuenta la compañera que mas tiempo lleva conmigo ha cumplido ya 21 años y la que menos 7.
B.M.: Eres una veterana, Concha, al pie del cañón, y estandarte del éxito. ¿Cómo educas a tu equipo entonces para que forme parte activa de esta experiencia?
C.D.M.: Para formar a mi equipo y que siempre estén en su máximo, les hice responsables de un tipo de servicio y con cada una de ellas, amplío conocimientos específicos del trabajo que realizan y luego son las encargadas, ellas mismas, de compartirlo con las demás compañeras. Todos los martes me reúno para tratar lo que es prioridad en esa semana, desde cualquier incidencia entre ellas, pasando por resolver dudas respecto a cualquier trabajo del salón y hasta llegar a crear la colección de moda en temporada.
Mi equipo es la herramienta más valiosa que yo tengo, ellas, son todas mujeres, hacen camino conmigo y juntas tenemos un gran recorrido.
B.M.: ¿Y cómo lo haces tú misma, cómo estás al tanto de lo último en tendencias, técnicas, productos...?
C.D.M.: Mi mente es inquieta y no deja de dar vueltas buscando inspiración para crear moda, desarrollar ideas de corte y color que favorezcan y fusionen con las tendencias de ropas del momento. Me encanta la costura y es un lujo para mí cortar el pelo pensando que la cabeza es el cuerpo y el pelo la tela que cae sobre el mismo (echa mano de una bella metáfora, y es que lo del diseño también le apasiona, como pronto desvelaremos...).
B.M.: ¿Te consideras empresaria?
C.D.M.: Sí, soy empresaria (afirma convencida, sin titubeo alguno). Ser empresaria entra en el lote desde el minuto uno en el que decides montar un negocio.
B.M.: ¿Es difícil dirigir un salón de peluquería?
C.D.M.: No es difícil dirigir un salón si tienes establecidas unas normas, unos protocolos a los que yo llamo cultura del salón, lleva su tiempo hasta que el equipo lo siente y lo vive pero una vez que lo interiorizan, el trabajo fluye en un ambiente armonioso.
B.M.: ¿Y cómo has logrado y logras conciliar vida profesional y personal?
C.D.M.: He conseguido conciliar vida profesional y familiar porque para mí es fundamental. Mi vida me encanta, en todos los sentidos, y quiero exprimirla; disfrutar de todo cuanto hago; dedicarle el tiempo que merece la familia, el trabajo, el desarrollo personal, los amigos... Lo considero esencial y he conseguido desconectar entre una parcela y otra (sonríe alegre). Le dedico íntegramente cada momento a poner mis sentidos en la tarea que desempeño, así doy el 100% y es como yo me siento plena. Esto lo he conseguido, también, estableciendo horarios europeos en el salón.
La peluquería está en una fase de ajuste y adaptación debido a la situación provocada por la pandemia, le sobran cargas burocráticas e impositivas y por otro lado carece de visión empresarial.
B.M.: ¿Qué opinas acerca de la educación actual en nuestro país y en lo referido a esta profesión?
C.D.M.: Respecto a la educación social de nuestro país, pienso que debe ser el pilar mas sólido que nos sostenga fuertes en todos los sectores, potenciando una formación profesional de calidad que llegue a muchos desempeños laborales que sufren desgastes por falta de especialistas. En cuanto a la educación actual referida a esta profesión opino que en nuestro país contamos con muy buenos centros tanto públicos como privados que son fantásticos.
B.M.. ¿Y qué piensas acerca del 'boom' de formaciones digitales que se han producido a raíz de la pandemia?
C.D.M.: La formación digital ha sido un buen recurso tanto económico para quien la ha impartido, como efectiva para quien hemos hecho uso de ella aprovechando que teníamos más tiempo.
B.M.: ¿Y acerca de la peluquería española en general, qué es lo que dirías?¿Qué le sobra, de qué carece, qué es lo que más le caracteriza?
C.D.M.: La peluquería está en una fase de ajuste y adaptación debido a la situación provocada por la pandemia, le sobran cargas burocráticas e impositivas y por otro lado carece de visión empresarial. La peluquería actual se caracteriza por su gran valor humano y su continuo esfuerzo por formarse y adaptarse a cada momento social.
B.M.: ¿Por qué I.C.O.N. es tu línea de cabecera?
C.D.M.: I.C.O.N. es mi línea de cabecera porque es mi marca por excelencia. En ellos he encontrado la horma de mi zapato, es la marca con la que me identifico, su continua evolución me motiva y me ayudan a crecer.
B.M.: Si tuvieras que definir a la marca I.C.O.N. ¿Cómo lo harías?
C.D.M.: Puedo decir que I.C.O.N. no es solo un cosmético, es un compromiso de valores, I.C.O.N. es una manera de sentir el mundo de la peluquería. Su filosofía les caracteriza les diferencia del resto y les hace únicos.
He conseguido conciliar vida profesional y familiar porque para mí es fundamental. Mi vida me encanta, en todos los sentidos, y quiero exprimirla; disfrutar de todo cuanto hago.
B.M.: ¿Qué has aprendido con I.C.O.N. que no olvidas?
C.D.M.: Con I.C.O.N. he aprendido a hacer hoy lo que realmente importará mañana. Me han enseñado a desarrollar la capacidad de aceptar cualquier nueva situación por pésima que sea y defenderla reinventándome sin lugar a lamentaciones. Me enseñaron a ver que cuanto antes me adapte a un cambio antes lo interiorizo y lo hago mío, cuando algo es de uno mismo lo defiende siempre.
B.M.: Tu cosmético fetiche sin el cual no vivirías.
C.D.M.: Mi cosmético fetiche se llama Inner. Mi pelo tiene un antes y un después de tratármelo con Inner, mi textura natural es deshidratada (propia de cabellos rizados) y con Inner lo tengo totalmente controlado (sonríe y se toca el pelo, precioso por cierto, Concha, le digo. Y es que es verdad posee un brillo y una textura espectacular... (Reímos a la par).
B.M.: Aparte de Inner de I.C.O.N., ¿cómo cuidas tu cabello?
C.D.M.: Con mi cabello soy muy exigente, me gusta llevarlo perfecto. Me lo cuido también con la línea orgánica de I.C.O.N. que es mi Regimedy preferido, aunque en otoño aplico Detox y jamás utilizo plancha o secador sin antes hacer tratamiento.
B.M.: ¿Sigues las tendencias?¿Cambias a menudo de imagen?
C.D.M.: Sigo las tendencias, me gusta tener aires nuevos, resultan frescos y aportan juventud. Yo soy de cambios constantes pero sutiles, no suelo tener la necesidad imperiosa de cambios radicales de momento, Siento más necesidad de cuidar mi pelo que de cambiar su estilo.
B.M.: ¿Qué se cuece en cuanto a tendencias para la próxima temporada?
C.D.M.: En cuanto a tendencias para la próxima temporada, apostamos por los flequillos en todas sus versiones, melenas rectas ultralisas, melenas largas muy degradadas con bastante color en los contornos y cortos tipo pixie.
B.M.: ¿Qué opinas de los concursos de peluquería?¿Te has presentado alguna vez?¿Lo harías?
C.D.M.: En cuanto a los concursos de peluquería pienso que es bueno porque sirven para perfeccionarte aún más, cuando te presentas para competir tienes que buscar tu máximo y aunque no ganes te quedas con esas bases para siempre. Nunca me he presentado, pero sí, ¡claro que lo haría! y seguro que lo disfrutaría.
En cuanto a tendencias para la próxima temporada, apostamos por los flequillos en todas sus versiones, melenas rectas ultralisas, melenas largas muy degradadas con bastante color en los contornos y cortos tipo 'pixie'.
B.M.: ¿Y qué piensas de las redes sociales?¿En qué ayudan en un salón de peluquería?
C.D.M.: Las redes sociales son un medio fantástico para ver y que te vean, cada día son una oportunidad para conocer lo que pasa en el mundo. A nivel de peluquería las redes nos ayudan a ampliar el campo de visión de nuestros escaparates, nos permite mostrar nuestro día a día a muchas personas y captar la atención de posibles nuevos clientes.
B.M.: Un sueño cumplido, Concha.
C.D.M.: Llegar hasta donde estoy ahora mismo es un sueño cumplido para mí.
B.M.: Otro por cumplir.
C.D.M.: Mantener a mi equipo, seguir creciendo y crear una colección de ropa es mi ilusión (nos desvela). Mi sueño es disfrutar despierta de estilismos completos creados por mí.
Estamos seguros que así será, visto lo visto y una vez conocida Concha, su salón y su equipo, imbatible y en crecimiento desde principios de la década de los 2000. No sin antes, reproducir lo que esta mujer peluquera, creativa, sincera y entregada quiere que sea el broche y cierre de esta entrevista. "Quiero agradecer a la revista y a I.C.O.N. el haber pensando en mí para esta bonita experiencia. Hasta siempre, lectores de Beauty Market" (a quienes lanza un saludo y un beso...).
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