Por qué no estás ganando dinero

¿Te has parado a pensar en algún momento que lo tuyo no es solo peinar y embellecer sino que hay mucho más detrás?

Te embarcaste en la aventura de abrir un salón de peluquería, y hasta ahora, a trancas y barrancas, lo único que has conseguido son quebraderos de cabeza a la hora de casar los números rojos.

Que si la cosa está muy mal, que si la inflación, que si lo que pago por los productos, el stock, los muebles... Quejas y más quejas y decisiones a veces, bueno, la mayoría de las veces, poco, muy poco acertadas. Que si compro barato, que si rebajo sueldos, que si reduzco jornadas... Todo, por otro lado, actuaciones aceleradas que se vuelven en tu contra, porque cuando comienzas a querer ver los resultados positivos te chocas contra el muro: ¡ha sido lo contrario!

¿Qué estás haciendo mal? Porque tú fracasas, pero tu vecino de enfrente, ¡mírale!, sin parar de trabajar y abriendo salones... Vestido de marca y con un Tesla frente a la entrada: feliz, sonriente, ¡exitoso!

Carlos Valenzuela es un autor, educador y profesional de la belleza retirado al que le encanta compartir las lecciones aprendidas durante su larga carrera. Un gurú de la educación y el coaching sin duda, que analiza esta situación y el cual nos encamina hacia la comprensión de por qué nuestra peluquería no despega, solo nos mantiene e incluso únicamente nos genera deudas...

¿Por qué no ganas dinero, peluquero, peluquera?

No encontrar un nicho rentable.
Es posible que las habilidades generales de peluquería no produzcan ganancias significativas. Identifica un nicho que puedas dominar, como el estilo nupcial o el aseo masculino. Combina tus habilidades con una especialidad que disfrutes para darte a conocer como un experto en ese nicho. Luego, puedes cobrar tarifas premium como especialista.

Descuentos y servicios gratuitos.
Comenzar con descuentos o regalos con la esperanza de obtener un trabajo remunerado a menudo es ineficaz. Los que podríamos denominar como 'clientes obsequio' nunca nos recomendaron realmente. Simplemente obtienes la reputación de ser de fácil, económico acceso. Deje que el trabajo no remunerado fortalezca tu cartera solo si sirve a objetivos financieros definidos. Ten una estrategia establecida.

No cobrar lo suficiente por los servicios.
Cobrar menos es un error común: investiga las tarifas del mercado en su nicho para evitar rebajarte a ti mismo. Conoce su valor y rehaz todo lo que esté por debajo de dicho precio, asegurándote de que tus servicios se valoren adecuadamente.

Incapacidad para construir y retener clientes.
Encontrar clientes es la parte difícil. Una vez que entren por la puerta, es tu trabajo hacer que regresen. Pero no te hagas el necesitado. Hay un término medio para este esfuerzo. Observa y aprende de peluqueros experimentados mientras interactúan con sus clientes. Toma una clase sobre técnicas comprobadas de retención de clientes en salones de belleza para garantizar un flujo continuo de los mismos. El estudio y el reciclaje también se hicieron para peluqueros.

Falta de habilidades de ventas o marketing.
Incluso una peluquería excepcional pasa desapercibida sin un marketing eficaz. Perfecciona tus habilidades de ventas y aprende tácticas de marketing rentables como la promoción en las redes sociales o webs al efecto. La autopromoción es esencial para el éxito.

Esperando a ser "descubiertos".
El boca a boca funciona, pero puede tardar un tiempo en hacer efecto. Esperar a ser descubierto no es una estrategia viable. Ponte a ti mismo y a tu trabajo frente a clientes potenciales de manera proactiva. Conéctate agresivamente y promuévete sin vergüenza.

10 trucos a anotar y practicar... y convertirte en un peluquero millonario

Aquí está tu truco sobre cómo superar los obstáculos financieros con la mentalidad y las estrategias adecuadas, según Valenzuela:

• Prioriza la peluquería como negocio y carrera.
• Elige un nicho en el que destaques y disfruta.
• Desarrolla un portfolio que muestre tu mejor trabajo.
• Adopta una mentalidad de ventas y negocia las tarifas con confianza.
• Establece metas de ingresos y realiza un seguimiento del progreso con regularidad.
• Cobra tarifas que reflejen tu experiencia.
• Busca educación empresarial y tutoría.
• Amplía tu red y conéctate con personas influyentes de la industria.
• Promuévete descaradamente para atraer más clientes y oportunidades.
• Comenzar.