Por María J. Toca.
Gerente grupo Velvet

Malos vientos hay en nuestro mundo. Por mucho que nos hablen de brotes verdes, lo cierto es que seguimos en crisis, con retraimiento de nuestros servicios, ventas y el temor de continuar con estos malos tiempos.
Es preciso buscar fórmulas que nos faciliten el camino que debemos recorrer si no queremos perecer en el intento de llevar a buen puerto nuestras empresas de estética.

En Velvet hemos creído oportuno hacer cambios en nuestra visión del negocio. Ir por libre es muy gravoso, a la vez que arriesgado, ¿porqué no unificar esfuerzos en forma de asociados franquiciados?
Mirando otras empresas que ya han recorrido este camino nos dimos cuenta de que la mejor forma de encarar la crisis era uniéndonos; en grupo tenemos más fuerza de cara a los proveedores y distribuidores, conseguiremos descuentos, mejores precios, ofertas inmejorables, a la vez que podemos proyectar una imagen de marca fuerte y seria de cara al cliente, y de esta manera ser competitivos con las empresas que poseen un gran capital e inversiones publicitarias millonarias.

Uno solo poco puede, pero pensando en aunar los esfuerzos de muchas pequeñas empresas podemos conseguir lo que los grandes: buenos precios, publicidad importante y resonancia nacional.
Una mente es importante, pero varias caminando por el mismo camino, aportando ideas, generando impresiones, es algo que produce mucha fuerza y buena imagen.

Asociándonos en forma de franquicia, porque de alguna manera tenemos que denominar esta idea de estética unificada y fuerte, creemos que caminaremos a buen puerto de una forma unidireccional y segura.
Compartir protocolos, conocimientos, experiencia, realizar unificadamente los pedidos, adquirir aparatología directamente de fabrica, consiguiendo de esta manera eliminar intermediarios que encarecen de forma abusiva el mercado de la estética, y conseguir tener en nuestras manos el timón de nuestras empresas sin que nadie maneje nuestros ingresos.

Creemos en esta idea y la participamos a todas las compañeras, que tienen empresa abierta, así como a los que están pensando en dedicarse a este trabajo ejemplar y apasionante.

Desde Velvet creemos que es posible remontar la crisis uniéndonos en esta empresa unificada que proponemos.









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