Todo sobre los tonalizadores y sus posibilidades en coloración

Por méritos propios, los tonalizadores ya son los aliados y complementos idóneos de cualquier servicio de coloración (tinte, baño de color, etc.). En peluquería se suelen emplear para corregir tonos no deseados o potenciar colores, aunque no se deben confundir con los correctores, ya que son productos mucho más completos. Hemos hablado con José García, de José García Peluqueros, y José Valle, director creativo de Backstage BCN, quienes nos han aclarado todo tipo de dudas sobre los tonalizadores y sus posibilidades en la peluquería.

Realzar, neutralizar y potenciar un color

"Un tonalizador es un pigmento puro, con toda su intensidad, que se suele utilizar para potenciar un color, realzar, dar efectos de luz según el tóner, corregir o neutralizar otro color", comenta Valle. "En nuestro salón -continúa- lo mezclamos con el tinte, el baño de color, e incluso prepigmentamos el cabello con tóners puros cuando queremos oscurecer desde una altura rubia y bajar a tonos morenos. Además, le devolvemos al cabello todos los pigmentos naturales que eliminamos al decolorar de moreno a rubio. Aplicamos amarillo, naranja, rojo y violeta antes de aplicar un color negro o castaño para fijar más el color y que no tire a verde con los lavados. También los empleamos como pigmento puro".

Por su parte, José García considera a los tonalizadores como "tinturas oxidativas con altura de tono 9.5 y con dirección de reflejo". "En mi opinión, no levantan altura de tono en el cabello natural pero sí tienen el poder de direccionar el reflejo del cabello que previamente hemos coloreado", añade. Para el estilista, el tonalizador es una herramienta perfecta a la hora de corregir direcciones no deseadas, utilizándolos en tonos rubios para eliminar amarillos o simplemente personalizar los mismos. Así se pueden crear rubios "sublimes".

Los tonalizadores, ¿aclaran?

En un principio parece que los tonalizadores no aclaran, sino que facilitan pigmentación al pelo y no producen efecto raíz. Una opinión que comparte García: "Totalmente de acuerdo, pero debemos tener en cuenta que se deben utilizar con su porcentaje de oxidación. El mal uso del oxidante puede modificar el resultado influyendo en el punto de aclaración".

Sin embargo, Valle no es tan rotundo al respecto. Según el estilista, si el tonalizador se aplica en un formato de coloración con amoniaco sí aclara y levanta la raíz: "No demasiado, pero sí lo hace y fija de forma permanente si utilizamos oxidantes del 6 o 9%". Aun así, el pigmento durará más o menos en función de la porosidad del cabello. En consecuencia, los tonalizadores solo aclaran si contienen amoniaco o algún derivado que abra la cutícula y si los oxidantes son altos.

Tonalizador y corrector, ¿son lo mismo?

Los correctores son otro tipo de pigmento distinto del de los tonalizadores y se mezclan directamente con la tintura oxidativa, en opinión de José García. Por lo tanto, no se puede generalizar: si bien los tonalizadores corrigen tonos, se hablaría siempre de bases rubias, según el estilista.

Por otra parte, un tonalizador con toda su intensidad se puede emplear para conseguir ese color elegido y datar de un efecto de fantasía al cabello. Así lo afirma José Valle, quien recalca que un mismo tonalizador puede actuar como complemento de un color o baño de calor, e incluso corregir un color no deseado. El estilista aprovecha para darnos un consejo: "Imaginemos que quiero aclarar raíces cálidas y que ya sabemos que cuando aclaran quedan anaranjadas. Aunque utilicemos tonalidades cenizas, añadimos a la mezcla unos gramos de azul, dependiendo de la cantidad que utilicemos entre 2 y 5 gramos, y así podemos corregir totalmente esas tonalidades. Otro ejemplo muy común, cuando aclaramos una decoloración ya sea total o con mechas y tenemos un color amarillo, lo podemos corregir con violeta. En síntesis, los tonalizadores pigmentan y corrigen".

Efectos sobre cabello teñido o natural

Los efectos no son los mismos si se utilizan sobre cabello natural o teñido. En el primer caso, no aportaría ni reflejos ni levantaría tono, de manera que no se notaría en absoluto. No obstante, si se aplica sobre cabello teñido, sí se aportaría el reflejo o la corrección deseada, teniendo en cuenta que la altura del mismo sea de nueve o por encima de este, tal y como explica García, de José García Peluqueros.

Desde Backstage BCN, José Valle opina que un tonalizador puede aportar brillo y luz a un cabello natural, además de corregir tonos amarillos o cenizas, dar profundidad si se desea oscurecer alguna tonalidad y también intensificar el propio color natural. Asimismo, se puede jugar con colores puros que, según como sea la base, proporcionará un efecto multitonal natural y brillante. En un cabello teñido ocurre lo mismo, aunque también se puede transformar completamente el color, eliminar rojos, amarillos, naranjas, azules, verdes o violetas y avivar los colores con estos pigmentos.

Los tonalizadores se presentan en varios formatos: desde champús pigmentados que neutralizan y contrarrestan los tonos cálidos del cabello a pigmentos iónicos que fijan el color en formato mascarilla y funcionan como un mix de nutrición con color. Los tonalizadores también se presentan en formato gel aunque solo fijan sobre cabello decolorado y también con tecnología iónica casi de forma permanente. No obstante, es muy común utilizar el formato champú para corregir tonos, y a poder ser sin amoniaco ni ppd, en el salón.

Leyes de colorimetría

En este sentido, se recomienda seguir el círculo o rueda cromático y tener muy claro cuál es el color que contrarresta para corregir la dirección no deseada. Se parte de tres colores primarios, azul, amarillo y rojo. Y de tres secundarios que son la combinación de los tres primarios: verde, naranja y violeta. De la mezcla de azul y amarillo sale el verde, del amarillo con el rojo el naranja y del rojo con el azul el violeta. Por lo tanto, tenemos tres primarios y tres secundarios.

Según el modelo tradicional, los colores pigmento opuestos son:

• El azul es el color opuesto al naranja.
• El rojo es el color opuesto al verde.
• El amarillo es el color opuesto al violeta.

Esta es la regla o la ley del color que sirve de guía para corregir o intensificar colores.

Paso a paso a la hora de utilizar un tonalizador

José García: "Después de lavar el cabello, debemos secar con una toalla el pelo eliminando el exceso de humedad del mismo. Si el tonalizador se aplica con una sobrecarga de agua en el pelo, no obtendremos los resultados deseados".

José Valle: "Lo ideal es crear seis particiones en la cabeza, partiendo de una raya central que divide la cabeza en dos. Después trazamos una separación perpendicular en la parte delantera de las orejas y otra más en la posterior, detrás de las orejas, dejando dos divisiones más en la nuca. Tras las seis particiones empezamos a aplicar el tonalizador por la nuca, primero raíces, después medios y puntas. A continuación, masajeamos bien y aplicamos una generosa cantidad. Pasamos a la siguiente de más arriba y así repetimos hasta llegar al frontal, de manera que podemos observar desde las dos primeras secciones hasta las dos últimas en el frontal, la evolución del color y así conseguimos homogeneidad".