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Artículos técnicos

Factor de Crecimiento Epidérmico y su uso en rejuvenecimiento celular

Los factores de crecimiento son unas proteínas naturales que inducen la proliferación celular. En concreto, el Factor de Crecimiento Epidérmico (FCE) aporta beneficios regeneradores y antiaging en tratamientos y cosméticos especializados


04/01/2015

Factor de crecimiento epidérmico Por factores de crecimiento se entienden aquellos fragmentos proteicos, de pequeño peso molecular, pertenecientes al grupo de las citoquinas, que regulan las interacciones de las células del sistema inmune. Cuando estas proteínas, presentes en el plasma sanguíneo, se unen a los receptores de la membrana celular, la célula se activa o inhibe en sus funciones. Con el paso del tiempo, el organismo humano produce en menor cantidad estas sustancias tan beneficiosas. Los avances médico estéticos han hecho posible que se puedan recibir estas proteínas ya fuere vía infiltraciones, en el curso de tratamientos específicos, o mediante la aplicación de cosméticos que incluyen estas sustancias en sus formulaciones. "En cuanto a la piel, los factores de crecimiento intervienen en el proceso de curación, estimulan la reparación, el crecimiento y la diferenciación de las nuevas células sanas epiteliales. De ahí que se utilicen en el tratamiento del envejecimiento cutáneo. Básicamente, se trata de moléculas primarias de señalización que desencadenan el proceso de reparación. En este sentido, promueven el reclutamiento de nuevas células así como la producción de la matriz extracelular y la reubicación de los componentes necesarios para llevar cabo el proceso mencionado", especifica Inmaculada Canterla, licenciada en Farmacia y especialista en Dermocosmética. Estas sustancias actúan de forma no enzimática como señales intercelulares que modulan la función celular, regulando el crecimiento, la diferenciación y el metabolismo celular.

En la piel existen receptores de factor de crecimiento en la dermis, epidermis y pelo. La respuesta celular -según Canterla, directora de Cosmeceutical Center- no solo es mitogénica (proliferación de fibroblastos y queratinocitos) sino que también hay una respuesta no mitogénica que favorece la síntesis de colágeno, matriz intercelular y la formación de ácido hialurónico. Además, actúa sobre el superóxido de dismutasa, por lo que ejerce también acción antioxidante.

¿Todos los factores de crecimiento son iguales?

Existen un gran número de factores de crecimiento, en función de la reacción que desencadenen. Así, por poner algunos ejemplos, los TGF- alfa y PDGF inducen la activación y migración de fibroblastos al lugar donde se presenta el daño, y los VEGF facilitan la producción de matriz. La directora de Cosmeceutical Center clasifica una lista de factores de crecimiento que actúan en la curación de heridas:

  • PDGF, FGF y TGF-β actúan en la quimiotaxis de los monocitos.
  • PDGF, EGF, FGF y TGF-β intervienen en la migración de los fibroblastos.
  • PDFG, EGF, FGF y TNF actúan en la proliferación de fibroblastos.
  • VEGF y FGF intervendrán en la angiogénesis (o formación de nuevos vasos sanguíneos a partir de otros existentes).
  • TGF-β, PDGF y TNF actúan en la síntesis de colágeno.
  • PDGF, FGF y EGF intervienen en la secreción de Colagenasa.

Canterla aclara que es necesario distinguir entre el EGF (Factor de Crecimiento Epidérmico, en inglés Epitelial Growth Factor) y los factores de crecimiento de la piel, que como ya se ha visto son numerosos y cada uno con actividades diferentes y definidas. "El Factor de Crecimiento Epidérmico se puede considerar como uno de los más importantes en la piel. Es el responsable del crecimiento del epitelio hacia la superficie de la herida o daño de la piel. Pero todos tienen una gran importancia en la fisiología celular, tanto en sus funciones madurativas, metabólicas y de reparación", explica.

Consejos para evitar un envejecimiento prematuro

Factor de crecimiento epidérmico Como en cualquier proceso de envejecimiento, el EGF, así como el resto de factores de crecimiento y moléculas metabólicas en general, se comienza a producir en menor cantidad. La experta en farmacia nos explica el porqué: "El metabolismo se ralentiza y el cuerpo humano, no es capaz de producir metabolitos, desde el punto de vista genético, a la misma velocidad que cuando es joven". De hecho, no existe pauta alguna para estimular la producción de EGF, sino más bien pautas para evitar o al menos ralentizar la degradación de los EGF. Y evitar, también, un envejecimiento rápido o prematuro. Consejos como llevar una saludable y relajada, hacer ejercicio moderado, adoptar una dieta sana y equilibrada y alejarse de los agentes contaminantes externos, como la polución o el tabaco. "En definitiva, todo aquello que ralentice el envejecimiento hará que mantengamos por más tiempo la capacidad de síntesis de EGF", añade.

Beneficios del Factor de Crecimiento Epidérmico en centros de estética

Desde hace años, el Factor de Crecimiento Epidérmico se utiliza en centros de medicina estética. Canterla detalla, uno tras otro, los beneficios que aporta comparado con otros tratamientos reparadores y antiaging.

  • Incrementa la proliferación de células epidérmicas.
  • Disminuye las arrugas.
  • Mejora la cicatrización.
  • Incrementa la producción de colágeno.
  • Aumenta la generación de ácido hialurónico.
  • Incrementa la producción de elastina.
  • Aumenta la generación de fibronectina, laminina y glicosaminoglicanos, componentes esenciales de la piel.
  • Estimula el crecimiento de fibroblastos responsables de la producción de colágeno.
  • Y finalmente, inhibe y previene la rotura celular

Numerosas moléculas y mensajeros controlan el proceso natural de regeneración de la piel. De este modo, se debe adaptar y personalizar los tratamientos cosmecéuticos del paciente en función del estado y las necesidades de su piel en cada momento. Además de modular el envejecimiento cronológico, hay que diversificar los beneficios con buenas cinéticas de absorción para mejorar significativamente la manera en la que la piel envejece y los signos de daño en la piel. Para eso, es necesario contar con ingredientes claves y esenciales que deben ir correctamente formulados, según la directora de Cosmeceutical Center. "También podemos aplicar un PRP (Plasma Rico en Plaquetas). Esta preparación se aplica en el rostro, de forma intradérmica, durante una sesión de mesoterapia facial. Se utiliza una delgadísima aguja, casi imperceptible. Se aconseja combinar esta técnica con otros tratamientos específicos de rejuvenecimiento facial como la microdermoabrasión, radiofrecuencia, etc. Se aplican cuatro sesiones, una semanal. Y se debería realizar una sesión anual de mantenimiento", detalla Cantela. Asimismo, y con el propósito de luchar contra el envejecimiento de forma eficaz la experta da algunas pistas. Por ejemplo, vitamina C por la mañana, aplicación de EGF (factor de crecimiento) mañana y noche y vitamina A por la noche.

Cosmética novedosa con EGF

Factor de crecimiento epidérmico El proceso de obtención de factores de crecimiento se suele basar en la técnica conocida como ADN recombinante, que consiste en tomar una molécula de ADN de un organismo, sea un virus, planta o bacteria, manipularla en el laboratorio y clonarla dentro de otro organismo. Esta técnica ha sido ampliamente utilizada en el campo de la medicina y ha permitido el desarrollo de importantes avances terapéuticos, como por ejemplo, la producción de insulina recombinante y otras medicinas y vacunas. En concreto, existen varias fuentes de factores de crecimiento. Los procedentes de humanos tienen una actividad excelente -en opinión de Canterla-, pero tienen el riesgo de la transferencia de priones. Debido a problemas éticos su venta no se permite en Estados Unidos. Los provenientes de la bacteria E.Coli, de muy fácil manejo, por lo que son ideales para generar EGF de forma fácil y rápida. Los originarios de levaduras también de fácil manejo en laboratorio. Y finalmente los provenientes de plantas, generalmente cebada. Estos factores de crecimientos son de fácil manejo y gran capacidad de cultivo en invernadero, bajo control exhaustivo de las condiciones de crecimiento de las plantas. En los casos de EGF no humano, hay que tener muy en cuenta los niveles de "limpieza" de los EGF, es decir, la calidad y cantidad de filtrados a los que se someten.

Sin embargo, es necesario valorar los inconvenientes que existen cuando se selecciona la fuente de cada factor de crecimiento, tal y como sugiere la especialista. Algunos factores de crecimiento pueden tener baja actividad debido a un encapsulamiento indebido de la proteína y/o elevados niveles de citotoxinas, las cuales pueden causar reacciones alérgicas. Lo mismo que con glicosilaciones inadecuadas. Así pues, la calidad de la preparación que contiene el Factor de crecimiento puede afectar su actividad y la eficacia del producto. En cualquiera de los casos de la fuente escogida para la generación del EGF, lo importante no es su origen, sino cómo haya sido aislado y la calidad de la fórmula final donde se va a incluir el EGF.

En el mercado se hallan cosméticos muy avanzados con factor de crecimiento epidérmico. Como el sérum capilar de la marca Nanogen. O la crema de la firma Medical Beauty, a base de aminoácidos de colágeno, elastina y Factores de Crecimiento Epidérmico, que regeneran la piel. Una fórmula revitalizante que aumenta el grosor de la piel, le devuelve su elasticidad y firmeza y disminuye los efectos de la oxidación celular. Tras cuatro semanas de uso, se vislumbra una reducción de las líneas finas de expresión. Su uso regular acelera la cicatrización de quemaduras, tratamiento de queloides, acné y estrías. Se trata de una especialidad cosmética desarrollada por ingeniería genética, obteniendo un clon celular del Factor de Crecimiento Epidérmico humano (FCE). Este cosmético activa la proliferación de las células epiteliales, en la síntesis de proteínas y fibroblastos, mejora la circulación y aumenta la acumulación de colágeno.

Factor de crecimiento epidérmico Por su parte Canterla, licenciada en Farmacia y especialista en Dermocosmética, Nutrición y Medicina Antiaging, recomienda algunos productos de EGF. Como el de la firma islandesa Bioeffect (ORF Genetics) obtenido del endospermo de los granos de cebada, extraído en un ambiente totalmente inerte bioquímicamente. "Estos productos poseen enzimas proteasas de baja actividad, lo que le aporta una gran estabilidad al EFG, a diferencia de cuando se extrae con proteasas de alta actividad. En ese caso el activo se degrada rápidamente, evitando tener que almacenar el producto en frío". Esta cebada se cultiva en Islandia en pura tierra volcánica y se cultiva, de forma cuidadosa, en invernaderos ecológicos que utilizan energía renovable geotérmica. Los activadores celulares de ORF Genetics se usan en varias investigaciones médicas alrededor del mundo, además de su uso en los sueros de Bioeffect. "Y el segundo producto personalmente seleccionado es el de Medik8. Esta firma obtiene la proteína de bacterias (E.Coli) y luego la somete a un triple filtrado que garantiza su actividad, estabilidad y seguridad", aconseja.

Una molécula muy importante que ha llegado para quedarse en el tratamiento del rejuvenecimiento celular

El uso de Factor de Crecimiento Epidérmico no es una moda pasajera, sino una molécula muy importante en el tratamiento del rejuvenecimiento celular. Para la experta, los factores de crecimiento son moléculas biológicas poderosas que controlan todos los aspectos de la proliferación y diferenciación celular. Los científicos Stanley Cohen y Rita Levi-Montalcini descubrieron estas proteínas y fueron galardonados con el premio Nobel en Medicina en el año 1986 por su búsqueda e interpretación de la función de los EGF en biología celular. Desde entonces, múltiples estudios han confirmado el gran potencial en cosméticos de la EGF y otros activadores celulares.

 
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