Los tratamientos corporales con yeso se conocen ya desde el antiguo Egipto; sin embargo, desde hace unos pocos años vuelven a estar en boga debido a su efectividad como remodelantes.

Es posible potenciar su eficacia gracias a dos factores:
La utilización de yeso de fibras, mucho más ligero y de secado más rápido que el común. Aporta propiedades físicas tensoras y remodelantes.
La combinación de principios activos contenidos en su Activo Remodelante: ginseng, carnitina, guaraná, centella asiática y prele.
Todo esto unido a la técnica de masaje adecuada nos permite hacer tratamientos anticelulíticos-reductores o reafirmantes-antiflacidez, tanto en hombres como en mujeres y en cualquier zona: muslos, abdomen, brazos, etc.

Yesoterapia paso a paso

1. Una vez preparada la zona a tratar mediante exfoliación y masaje con producto adecuado, aplicamos el Activo Remodelante.

2. A continuación humedecemos las vendas y escurrimos sin retorcer. Procedemos a enrollarla sobre la zona ejerciendo presión. El cliente debe contraer la musculatura para ayudar al proceso y moverse lo menos posible durante el tiempo de secado.

3. Dejar puesto el vendaje un mínimo de 45 minutos y un máximo de 4 horas.

4. Para retirarlo lo cortaremos con unas tijeras de punta roma con objeto de no dañar la piel.

Se recomiendan entre 5 y 10 sesiones de yesoterapia con una pauta de tres sesiones a la semana.









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