En lo que se refiere a la práctica del running no todo son beneficios. La cara pierde sus volúmenes. Además, la piel del rostro se deshidrata y presenta un aspecto apagado. La mayoría de los runners acusan estos efectos negativos en el rostro. Ello sucede porque los corredores tienden a perder grasa de la zona de la cara. Algo similar a lo que les sucede a las personas que pierden mucho peso en poco tiempo. A esto se suma la flacidez provocada por el movimiento de impacto repetido contra el suelo que destensa los músculos del rostro.

Los profesionales del centro de estética Slow Life House han diseñado un protocolo facial específico para los corredores habituales, masculinos y femeninos. Este tratamiento facial se centra en hidratar a fondo la piel de rostro, cuello y escote en los meses de frío. En otoño invierno, estas zonas sufren las agresiones del viento y las bajas temperaturas. Además, este tratamiento contribuye a la recuperación cutánea.

¿Qué sucede realmente al correr?

El gasto calórico es importante por lo que se produce una pérdida de grasa. Como es habitual, esa pérdida no se produce solo de dónde deseamos. Así pues, el rostro se puede demacrar debido a una pérdida excesiva de grasa.

Los procesos de envejecimiento se aceleran debido al incremento del proceso de oxidación de las células. Este fenómeno se produce a raíz del esfuerzo de los músculos tras una carrera durante un tiempo prolongado. Los pies impactan de forma repetida contra el suelo provocando que algunos músculos se distiendan y pierdan tono. Los más habituales son los músculos de las mejillas. Al caer, estos músculos desdibujan y envejecen el rostro.

Al correr al aire libre la piel se expone a las inclemencias meteorológicas: sol, aire, temperaturas bajas y contaminación. La piel ofrece un aspecto deshidratado, ajado y con un exceso de radicales libres.

Paso a paso del protocolo Facial Específico Runners

  • Se inicia con una limpieza intensa de rostro, cuello y escote, sirviéndose de una leche limpiadora rica en activos hidratantes. Estos activos combaten la sequedad que provoca el frío.
  • A continuación se hace una exfoliación que elimina la suciedad, restos de polución y contaminación, así como la capa córnea más dañada y envejecida del rostro.
  • Se trabajan las áreas más problemáticas, en las que se acumula más suciedad y puntos negros. Por ejemplo, las aletas de la nariz. En este caso, se efectúa una extracción manual de las impurezas.
  • Se aplica un velo Refresh sobre el rostro con efecto calmante inmediato. Ello recupera la piel después del esfuerzo realizado tras la carrera.
  • Se añade una mezcla de vitaminas, minerales y nucleótidos. También se aplica un complejo de activos ultra hidratante. Asimismo, se aplica un masaje vía radiofrecuencia que incrementa la fuerza del colágeno de la piel así como el número de fibras.
  • Después, se extiende un producto especial para el cuidado peri orbicular rico en péptidos biomiméticos. Esto ayuda a rejuvenecer la zona de la mirada. La pérdida de grasa puede ocasionar apariencia de ojos hundidos.
  • El protocolo finaliza con la aplicación de una crema específica según el tipo de piel del paciente.








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