T-Shape se encuentra en los principales países europeos como Bélgica, Inglaterra, República Checa, Croacia o Suiza y es considerado como un tratamiento vanguardista y eficaz en la remodelación corporal y rejuvenecimiento facial. Los expertos europeos coinciden en que T-Shape ofrece unos resultados visibles y altamente eficaces desde la primera sesión.
En España, se está consolidado como un equipo funcional y rentable, especialmente por la combinación de tres tecnologías que trabajan independientemente o simultáneamente, según la necesidad que tenga el cliente:
- Láser frío lipolítico y dermorreparación: activa la lipolisis en las zonas tratadas, provocando una reducción de volumen corporal y eliminando los lípidos a través del metabolismo.
- Masaje subdérmico: tecnología de masaje asistida con rodillos motorizados, con 4 tipos de succión. Aumenta la circulación de la sangre, estimula el drenaje linfático y movilizando los tejidos graso, además alisa la superficie de la piel, obteniendo unos resultados visibles desde la primera sesión.
- Radiofrecuencia bipolar y multipolar: reafirmante cutáneo, mejora la elasticidad de la piel y la redensifica.
T-Shape se diferencia de otras plataformas por contar con 6 cabezales para poder tratar perfectamente cada zona corporal y facial. La posibilidad del modo simultáneo o individual permite controlar perfectamente la ejecución de la sesión, ya que la esteticista elige cuántas tecnologías usar a la vez obteniendo los mejores resultados para sus clientes.
El equipo no utiliza prácticamente fungible, a excepción de la loción electro conductora, ya que no requiere de malla para trabajarlo, y además carece de consumibles. El tratamiento completo normal suele incluir de 4 a 12 sesiones, a razón de dos por semana y la duración de la sesión es de 30-40 minutos por zona.
T-Shape proporciona resultados de lipoescultura quirúrgica sin necesidad de emplear ni cirugía ni anestesia, siendo completamente un equipo no invasivo.