Tras años de investigación, Crisderma ha elaborado una delicada emulsión de textura nacarada que cuida cualquier tipo de piel con una acción exfoliante de alta tolerancia: el Renovador Exfoliante Crisderma.
Este renovador celular estimula la regeneración de las células de la piel de forma natural. Libera la dermis de la acumulación de células muertas que obstruyen los poros y engrosan la capa cutánea, frenando la renovación celular.
La fórmula del renovador exfoliante une los beneficios de tres activos únicos procedentes del Mar del Norte:
- Agua Termal Marina: esta agua de manantial marino se obtiene en pozos del fondo del mar (chimeneas). Actúa como un agua activa hidratante por su especial composición en oligoelementos que estimulan la producción de los lípidos cutáneos. Además reestructura y nutre la piel al mejorar la estructura de la unión dermoepidérmica.
- Nácar de la Perla (pearl exfoliator): este polvo está elaborado a partir de perlas de cultivo auténticas y es considerado la base exfoliante de mayor prestigio que existe en el mundo cosmético. Arrastra las células muertas que obstruyen los poros de la piel, al masajearla en la forma gommage. Así consigue estimular la regeneración natural cutánea, activando la elasticidad, la luminosidad y la suavidad del cutis. Además, el Nácar de la Perla tiene un efecto despigmentante y aclarante que ayuda a eliminar las manchas oscuras de la piel.
- Dermochlorella: este activo es muy reconocido por su riqueza en proteínas (un 60%) y su alto contenido de aminoácidos que tienen una estructura muy cercana a la composición del colágeno humano, uno de los componentes más importantes para el sostén de la piel.
Aplicar una vez a la semana con suaves movimientos circulares hacia arriba (desde el centro del rostro hacia las orejas), sin necesidad de ejercer presión, y retirar con agua templada. Si conviene, insistir en las zonas más grasas como el mentón, la nariz y la frente. En las pieles secas o sensibles es aconsejable realizar la exfoliación quincenalmente.