Durante las últimas décadas se está haciendo evidente que la obesidad se está convirtiendo en un problema con carácter epidémico en el continente europeo, a causa del aumento en el consumo de alimentos ultraprocesados, que provocan que ya más de la mitad de la población presenten sobrepeso y obesidad, según un estudio publicado por UEG (United European Gastroenterology).

Con uno de cada tres niños afectados también por estas enfermedades, empieza a ser urgente tomar medidas para reducir la ingesta de productos tales como la bollería industrial, precocinados congelados, carnes procesadas o patatas fritas de bolsa, que son además asequibles, duraderos y, por ello, demasiado accesibles.

El mejor tratamiento de la obesidad infantil es la prevención y ello supone actuar en los primeros años de vida, instaurando hábitos saludables de vida: una alimentación equilibrada y promoción de la actividad física.

Además, el sobrepeso y la obesidad se han vinculado a un aumento del riesgo de sufrir cáncer, por su alto contenido en sal, azúcares añadidos o grasas saturadas, con lo que la UE debería restringir de alguna manera su publicidad, su accesibilidad por parte de los menores e imponer recargos fiscales que graven su producción y/o consumo, al tiempo que se impulsan campañas educativas hacia unos buenos hábitos alimenticios y de estilo de vida.

Al mismo tiempo, los expertos recomiendan que debería duplicarse el consumo de fruta, verdura, nueces y legumbres, reducir al 50% el consumo de carnes rojas y bajar el consumo de azúcar a menos de un 10% diario de la ingesta total de energía diaria, entre otras razones para evitar el coste (unos 81.000 millones de euros anuales) que generan estas afecciones, especialmente en países del sur de Europa como España, Italia, Malta, Grecia, Portugal o Croacia, que están abandonando alarmantemente la saludable dieta mediterránea.

Desde Clínica Opción Médica, centro que lleva más de 35 años tratando problemas de obesidad y sobrepeso, ofrecen su equipo multidisciplinar, integrado por nutricionistas y dietistas, psicólogos clínicos y médicos especialistas, para aprender a adquirir hábitos saludables y afianzarlos.









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