El karité procede de la sabana africana, nada menos del fruto del árbol que lleva su mismo nombre, también conocido como Vitellaria Paradoxa, que viene a significar "árbol de mantequilla".

El karité puede llegar a medir hasta 15 metros de alto, y conseguir un metro de diámetro, es extremadamente longevo, hasta tres siglos de antigüedad tienen algunos de estos árboles.

A la semilla de su interior la llaman almendra. Y de estas almendras se extrae la grasa, de ahí su textura mantecosa y por eso al resultado de esta elaboración se le denomina manteca de karité, un producto 100% natural utilizado para el cuidado corporal y cosmético. Esta manteca que sale de ese proceso de extracción -en frío sin refinar-, contiene vitaminas A, D, E, F pero también látex y lípidos insaponificables y minerales. Por eso, no es de extrañar que el karité sea el fruto que mayor capacidad de regeneración celular aporta a al cuerpo.

Su textura es como si fuera cera, que al estar en contacto con la piel se convierte en un aceite, por eso es también un producto de muy fácil aplicación. Contiene antioxidantes como los tocoferoles (vitamina E) y catequinas (que también se encuentran en el té verde).

Se han detectado otros compuestos específicos como alcoholes triterpénicos, cuya propiedad es de reducir la inflamación; ésteres de ácidos cinámicos, que tienen una capacidad limitada de absorber radiación ultravioleta (UV), y lupeol, que impide los efectos del envejecimiento de la piel inhibiendo enzimas que degradan las proteínas de la piel. La manteca de karité también protege la piel estimulando la producción de proteínas estructurales por células dérmicas especializadas.

Distinguir y elegir la Manteca de Karité de máxima pureza y propiedades

¿Cómo saber si es 100% pura, es decir, si es manteca de karité refinada o sin refinar? Importante, si es de color amarillo es la de máxima calidad. Sin embargo, la refinada pasa por un proceso de elaboración en caliente que le cambia el color y el olor natural tan característico. Así que siempre se debe comprobar que la manteca de karité sea sin refinar y tenga su color característico del sol africano del que procede. La manteca karité es un supercosmético, y el fruto del karité un superproducto (comestible). Como dato histórico, el kairté, dado este doble uso, ha sido un pilar fundamental de la farmacología africana.

De hecho, existen muchos documentos africanos que la mencionan. Un ingrediente muy valorado, por ejemplo, y también en Egipto.
Hubo reyes egipcios que ordenaron fabricar sus tumbas con madera de karité y Cleopatra era una fiel seguidora de este fruto y sus mantecas para cuidar y mantener su belleza.

Manteca de Karité BIO de Sundara.
La Manteca de Karité BIO de Sundara es un regenerador celular para cualquier parte del cuerpo. Debido a sus atributos, este producto cuenta con innumerables usos. ¿Cómo se aplica? Se trata de una especie de pasta que al entrar en contacto con la piel, gracias al calor corporal, hace que se diluya y deje la piel con un aspecto sano e hidratado.
¡Ojo! No se recomienda a personas alérgicas a las nueces y/o al látex natural.
Se debe aplicar directamente sobre la piel limpia y seca.

Sundara nació en el año 2008 "como pionera en España en el arte del diseño de cejas con hilo" de mano de su fundador Eduardo Lagunas. Desde su primera apertura, el éxito de la empresa ha sido imparable y actualmente está llevando a cabo su expansión en España a través de la fórmula de franquicia, sumada a una trayectoria exitosa y respaldada por la apertura de 13 establecimientos propios y más de 25 franquicias.









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