La empresa alcoyana de alta cosmética Germaine de Capuccini, recupera en 2021 buena parte del volumen de negocio perdido durante los cierres por la pandemia el año anterior. La retirada de restricciones y la recuperación económica generalizada permitieron que la firma alcoyana impulsase sus ventas un 15% hasta rebasar los 28,73 millones de euros, muy cerca de la facturación alcanzada en 2019 (20,3 millones).

La firma no utilizó la figura del ERTE ni ninguna otra de las medidas de apoyo habilitadas por el Gobierno para capear la crisis sanitaria en 2021.

Más allá de la recuperación de los ingresos, la empresa de cosmética consolidó en 2021 la senda de la rentabilidad, y que se ha acentuado con la entrada de sus nuevos propietarios, los fondos Acon y Torreal (que adquirieron Germaine a sus fundadores a principios de 2019). Si incluso en plena pandemia la firma arrojó beneficio pese a caer las ventas, en 2021 la mejora de la actividad permitió elevar el resultado después de impuestos hasta los 3,32 millones, un 54% más.

La firma no utilizó la figura del ERTE ni ninguna otra de las medidas de apoyo habilitadas por el Gobierno para capear la crisis sanitaria en 2021, y de hecho cerró el ejercicio con una plantilla media de 152 empleados, frente a los 116 del año anterior. Aunque la proporción es bastante equilibrada, las mujeres son mayoría en la plantilla. Los gastos de personal, en este sentido, pasaron de 6,35 millones a 7,55 millones.









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