En un mundo en constante evolución, la búsqueda de la belleza y el bienestar integral ha llevado a una interesante convergencia entre la Medicina Integrativa y el Cuidado Facial. Este enfoque holístico combina lo mejor de la medicina convencional y terapias complementarias para lograr una apariencia saludable y radiante desde adentro hacia afuera.

"La piel es un reflejo de nuestro bienestar general, y tratarla de manera aislada no siempre produce los resultados deseados a largo plazo", dice María Casado.

La Medicina Integrativa, que se enfoca en tratar a la persona en su conjunto, reconoce la interconexión entre la salud física, emocional y mental. Esta filosofía se ha trasladado al campo del cuidado facial, donde se busca promover la belleza, no solo a través de productos y procedimientos estéticos, sino también considerando la salud interna y el equilibrio emocional.

Por ello, María Casado, diplomada en psiconeuroinmunologia (PNI) por el Instituto de Ciencias Naturales y experta en Medicina Integrativa y Belleza Facial por Regenera, señala que "la piel es un reflejo de nuestro bienestar general, y tratarla de manera aislada no siempre produce los resultados deseados a largo plazo". Ella agrega que la medicina integrativa se centra en identificar y abordar las causas subyacentes de los problemas de la piel, como el estrés, la alimentación y el desequilibrio hormonal, y combina terapias convencionales con enfoques naturales para obtener resultados más efectivos y duraderos.

¿Cómo funciona?

El enfoque holístico para el cuidado de la piel incluye:

1. Evaluación Integral: los especialistas en medicina integrativa realizan una evaluación exhaustiva que incluye la historia médica, el estilo de vida, la alimentación y el análisis de la piel. Esto permite identificar factores desencadenantes de problemas cutáneos y abordarlos de manera efectiva.

Los especialistas en medicina integrativa realizan una evaluación exhaustiva que incluye la historia médica, el estilo de vida, la alimentación y el análisis de la piel.

2. Terapias Complementarias: se utilizan terapias como la fotobiomodulación con el láser LYMA o la nutrición personalizada y la gestión del estrés para mejorar la salud de la piel y promover su belleza natural. La fotobiomodulación. Parece de ciencia ficción, pero es la tecnología en la que se sustenta e implica el uso de luz láser de baja potencia para mejorar la piel, en lugar de dañarla.

3. Productos Inteligentes: la medicina integrativa favorece el uso de ingredientes con estudios clínicos y resultados demostrados por expertos. Casas como Omorovicza, Sarah Chapman, Natura Biseé o SkinRoutine By Paloma Sancho, entre otros, componen el repertorio de productos utilizados en el facial según la condición y necesidad desde la piel.

4. Mente y Cuerpo: el enfoque holístico también incluye técnicas de relajación, meditación y yoga, que ayudan a reducir el estrés y mejorar la salud emocional, lo que se refleja en una piel más radiante.

Este nuevo enfoque ha ganado popularidad en los últimos años, ya que las personas buscan alternativas más saludables y sostenibles para el cuidado de la piel y la belleza. “Al abordar tanto la salud interna como la apariencia externa, la Medicina Integrativa y la Belleza Facial juntas ofrecen un enfoque completo que resuena con aquellos que buscan un bienestar duradero y una belleza auténtica”, añade María Casado.

Es una filosofía de tratamiento perfecto para poner a punto la piel cuando “se encuentra reactiva, sensible, con manchitas, con tono cetrino o simplemente para iniciar un protocolo de cuidado facial”, explica la experta.

El método de María Casado en Wellness Boutique Experience tiene una duración de 90 minutos.









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