El láser continúa siendo una de las soluciones más demandadas a la hora de la depilación definitiva. Además, y dado que se trata de una tecnología en constante evolución, se trata antes de la llegada del verano, y aún en los días de sol de una opción no invasiva ideal para poner en marcha y practicar en cualquier centro de medicina estética que ser precie.

Los láseres basan su éxito en la concentración de la energía de la luz para enfocar selectivamente los folículos pilosos y prevenir el rebrote. En 2017, las estadísticas demuestran que los procedimientos de eliminación del vello mediante láser crecen en cuanto a demanda, situándose en un millón de tratamientos.

Cinco cosas que debes saber

» Aconseja a tu paciente la secuencia correcta de sesiones reiteradas hasta acabar con el vello. La eliminación del vello requiere generalmente de cuatro a ocho tratamientos separados y espaciados de tres a seis semanas Debido a que todos sus folículos pilosos tienen diferentes ciclos de crecimiento, los tratamientos deben programarse regularmente para obtener un resultado completo. No es raro que se necesiten tratamientos de mantenimiento una o dos veces al año porque las hormonas fluctuantes pueden hacer que el vello crezca de nuevo. La depilación láser es una de las soluciones más demandadas a la hora de la depilación definitiva tanto para hombres como para mujeres. Es una opción no invasiva ideal para poner en marcha y practicar en cualquier centro de medicina estética.

» Trabajarás mejor sobre pelo oscuro. Porque los láseres apuntan el pigmento o el color en los folículos del pelo. El rubio o el pelo blanco pueden no responder tan bien a la depilación permanente. El color de la piel desempeña un papel fundamental en el láser específico que se selecciona. Los láseres más modernos y sofisticados pueden no obstante, arrojar óptimos resultados en vello más fino.

» Sin dolor, a pesar de lo que se piense. Sólo hay que avisar de la sensación de la descarga y el olor a quemado. La energía del laser se convierte al calor, que daña el folículo de pelo. El dolor desaparece del todo con los nuevos láseres que disponen de mecanismos de enfriamiento.

» Los efectos secundarios, si los hubiera, son leves y terminan con el tiempo. Los posibles efectos secundarios incluyen hinchazón leve alrededor de los folículos pilosos, enrojecimiento leve, irritación temporal de la piel y cambios de pigmento en personas con piel más oscura. Una compresa fría o un paquete de hielo ayudará a que la piel no se irrite. Muchos efectos secundarios pueden ser evitados eligiendo el tipo apropiado de láser.

» Protección. Un correcto fotoprotector es siempre obligado. Por eso, es mejor aprovechar el invierno y los meses previos al verano para realizar tratamientos de depilación.









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