Que los desafíos para el global de los mortales en pro del planeta son muchos y de naturaleza eco, sostenible y limpia, es una máxima aceptada ya por la mayoría.

La industria de la belleza y el cuidado personal innova, consciente de los nuevos retos medioambientales, y nos sorprende con productos que revolucionan algunas de las bases y axiomas clásicos conocidos hasta ahora.

La industria cosmética ha comenzado a reparar sus errores y reducir su huella ecológica.

Los consumidores, cada vez más informados, alineados con la necesidad de preservar su entorno, exigen a su vez rutinas y productos 'beauty' sostenibles y responsables.

Pero, ¿en qué se traduce esta postura?
La belleza y el cuidado personal busca aquellas apuestas que sean por encima del resto más limpias, con ingredientes naturales, cosméticos sólidos, por ejemplo, que ahorren agua, y accesorios reutilizables, entre otros muchos.

Estas que vienen a continuación, en resumen podrían ser las variables que contienen a la 'belleza sin desperdicio', limpia y reciclable.

La innovación de la belleza, cosméticos y productos rompedores que no generan desperdicios

La industria cosmética ha comenzado a reparar sus errores y reducir su huella ecológica.

Todo se convierte en circular.
La línea recta con principio y fin, abandona su sentido y ahora lo que se necesita es de lo circular.

Para ello, reducir la producción de desechos requiere reciclar o reutilizar los envases o degradarlos biológicamente. Es en estos temas que las marcas de cosméticos están centrando ahora su investigación y lanzamientos, y muchas ya han comenzado a ofrecer soluciones innovadoras.

Si miramos fuera de nuestras fronteras, encontramos algunos ejemplos pioneros. Juni Cosmetics es una de las marcas que ha apostado a lo grande por el reciclaje.

Fundada por la maquilladora Madeleine White, la marca ha trabajado con los expertos en packaging para eliminar el plástico de sus productos de belleza. El resultado es una colección cápsula de labiales de alta gama (Luxury Hydrating Lipstick) con fuerte poder hidratante, formulada con aceites orgánicos, vitamina E y ácido hialurónico vegetal, cuyos tubos están fabricados íntegramente en aluminio, por lo tanto totalmente reciclables.

Además, hay que resaltar otra característica básica de este gesto, el de no generar desechos contaminantes, y es que el tubo de estas barras es por entero de aluminio, sin ninguna otra parte utilizando material distinto, incluidos los engranajes del mecanismo de apertura y cierre, lo que hace posible reciclar el producto sin tener que desmontarlo.

En tercer lugar decir que estos nuevos labiales de la firma, son Veganos certificados, contienen solo ingredientes orgánicos y de origen sostenible.

Segunda vida, concepto reutilizable.
En la misma línea, la marca Izzy Zero Waste Beauty ha presentado la primera máscara de pestañas reutilizable y reciclable del mundo, que por lo tanto no genera residuos. Hecha en tubo de acero inoxidable, Zero Waste Mascara se entrega sin ningún embalaje en sobres reutilizables a base de materiales reciclados. Un servicio de suscripción permite a los consumidores la posibilidad de recibir una nueva máscara de pestañas esterilizada que rellenará cada tres meses, acompañada de un sobre prepago para devolver la máscara de pestañas anterior, que será limpiada y rellenada para una segunda vida.

Después de años en los que los cosméticos han estado pasando de los frascos de cristal a los envases de plástico, más económicos y maleables, la industria recupera el vidrio como un nuevo contenedor capaz de tener más de una vida.

Lo que se lleva es recargar.
Después de años en los que los cosméticos han estado pasando de los frascos de cristal a los envases de plástico, más económicos y maleables, la industria recupera el vidrio como un nuevo contenedor capaz de tener más de una vida.

No solo hablamos de reciclar el cristal y utilizar vidrio reciclado, sino de la opción cada vez más habitual de recargar los envases. Uno de los últimos lanzamientos de Giorgio Armani, My Way, es un perfume recargable que permite rellenar el frasco sin necesidad de acudir a ningún establecimiento, además de reducir un 32% el cartón, un 55% el vidrio, un 64% el plástico y un 75% en el metal, en comparación con cuatro envases de espray de 50 ml.

Más oxígeno y plantas y flores para el planeta.
Especializada inicialmente en herramientas de escritura sostenibles, la empresa danesa Sprout World también ha dado un paso hacia una rutina de belleza circular. Recientemente ha lanzado un delineador de ojos que se puede plantar en una maceta.

Sprout, ese es su nombre, está totalmente libre de microplásticos y se usa como cualquier otro delineador de ojos pero con una excepción. Al final de su vida, se puede plantar en una maceta y luego regar, para que se convierta en flores. Esto es posible gracias a la cápsula ubicada al final del producto, que contiene las semillas necesarias.

Productos sorpresivos.
Como la pasta de dientes del futuro, que se vende en pastillas y respeta el medio ambiente.

Las alternativas a la pasta de dientes de toda la vida se multiplican en el mercado, con la finalidad de explorar nuevos formatos. Después de descubrir la ayurvédica higiene dental con aceite o los geles, llegan los dentífricos en formato pastilla: de bote reciclable, a prueba de control del aeropuerto y en el formato más mini que podamos imaginar.

Su funcionamiento es sencillo. Solo hay que colocar una pastilla en la boca, morderla y cepillar los dientes con un cepillo tradicional.

Marcas como Lush ya comercializan sus propios dentífricos en pastillas, y en sus fórmulas al xilitol (limpiador y desinfectante) se le suman otros edulcorantes como la stevia, además de flores con efectos anestesiantes para aliviar dolores dentales, caso de Bubblegum, o mentol, jazmín, vanilla o fresas para una sensación más aromática, como Toothy Fruity.

Este tipo de formatos surgen para reducir los residuos de los botes de pasta de dientes habituales que, en palabras de Lush, "tardan 100 años en degradarse (¡si es que lo hacen!)". Además de las pastillas, la innovación de la marca es también utilizar envases elaborados con material reciclado y 100% reciclables.

Como vemos, las marcas están trabajando de forma más que imaginativa y de modo constante en alternativas sostenibles a la cosmética tradicional para hacer que usos, costumbres y productos, sean ante todo más ecológicos y menos contaminantes, reiteramos (¡No nos cansamos ni cansaremos de repetirlo!). Hablamos de la belleza sin desperdicio...









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