La piel del cuello tiene unas características únicas que hacen que sea una de las zonas que antes envejecen. En palabras de Ana Santamarina, experta en dermocosmética y formulación: “Es una piel que carece de soporte óseo, con un tejido muscular fino que está sometida de manera constante a estiramientos y movimientos de flexión y rotación del cuello (como cuando estamos haciendo uso del móvil) que provocan su envejecimiento prematuro”.

Por si fuera poco, “posee una dermis muy fina que prácticamente carece de glándulas sebáceas” (el sebo ayuda a hidratar y lubricar la piel) y suele cuidarse menos que la piel del rostro.

Un buen comienzo

Aconseja Santamarina que, para cuidar correctamente de esta zona, es necesario utilizar productos muy hidratantes, que estimulen la producción de colágeno y elastina pero sin irritar. “En mi opinión es innecesario el uso de exfoliantes muy agresivos, prefiero el uso de polihidroxiácidos como la gluconolactona, que además es muy antioxidante y tiene un efecto antiglicación”.

¿Podríamos utilizar una hidratante habitual de rostro en el escote? “Sin duda, de hecho siempre recomiendo extender la hidratante facial hacia el cuello y el escote. También con el fotoprotector”, sugiere.

El trío de magníficos: DMAE, péptidos y factores de crecimiento

La experta en formulación argumenta cuáles son los tres activos que cree no deberían faltar en una fórmula cuando se va a utilizar sobre la piel del cuello. “Me gustan especialmente”:

» Activos tensores e hidratantes como el DMAE a una concentración máxima del 2,5% (“es la máxima permitida en cosmética y la más efectiva”).

» Péptidos que mejoren la apariencia de arrugas, como el argireline (“y su efecto botox-like, que provoca la relajación muscular a nivel tópico”).

» Factores de crecimiento que estimulen la síntesis de colágeno, el ácido hialurónico y la elastina (“estos activos optimizadores son lo último en cosmética por su capacidad de estimular la proliferación celular, promover la formación de nuevos tejidos y regular los diversos procesos biológicos”).

Un último consejo

“Cuando se aplica una crema, es fundamental aprovechar el momento para realizar un breve drenaje linfático”, aconseja Santamarina. “Solo hay que hacer movimientos suaves desde el mentón hacia la clavícula, hasta la total absorción de todo el producto”.

Recomendado.

» Ultra A.
Tratamiento intensivo de noche para el rostro y el cuello con argireline 5% para reducir las arrugas, así como retinal 0,1%, capaz de estimular la producción de colágeno y mejorar el tono y la textura de la piel. Se suman a la fórmula: niacinamida 4%, que mejora la función barrera, hidrata y calma; Paradol activo antioxidante y antipolución; aceites de jojoba y regaliz, de acción calmante, hidratante y antioxidante; y vitamina E, con la capacidad de estimular las defensas naturales de la piel.

» GF Lift.
Sérum reafirmante ultraconcentrado con cinco potentes factores de crecimiento liposomados que se complementan unos a otros y DMAE al 2,5%. La fórmula se completa con ácido hialurónico de alto peso molecular -hidrata y repulpa la piel- y vitamina E -potente antioxidante de acción hidratante y protectora-.









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