"La igualdad es el alma de la libertad;
de hecho, no hay libertad sin ella”.
Frances Wright, conocida como Fanny Wright,
fue una escritora, librepensadora, feminista
y abolicionista, ciudadana estadounidense
desde 1825 (1795-1852). ​

Salones de peluquería libres de etiquetas. Ya no es cosa solo de hombres (qué antiguo), ni de mujeres, porque cada vez son más las personas que no desean verse definidas por dichas etiquetas. Las industrias y empresas hoy apuestan por la corriente ‘gender-neutral’, o lo que es lo mismo, por la inclusión y la igualdad.

En lo referido a la peluquería, los salones ‘gender-neutral’ serán los ideales para personas que no quieran ser juzgadas ni etiquetadas, y que se alían con la moda y la tendencia donde la ambigüedad reina a su gusto y por suerte para hacer posible que un hombre luzca una melena larga, tanto como una mujer se decante por un corte pixie o mullet tal y como también pudiera hacerlo el sexo masculino, el no binario, o cualquier otro que defienda una posición de no género.

Lo cual nos lleva una vez más a concluir que la diferenciación de precios en función de si se es hombre o mujer, ha quedado obsoleta. Porque, peluquero o peluquera, deberás diseñar tus tarifas en base a la dificultad técnica de tu servicio y tiempo empleado, independientemente de si has trabajo una cabeza femenina o una masculina. Tenlo claro.

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¿Tienes las mismas tarifas para hombres y mujeres?

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