El rubio mostaza parece ser uno de los tonos que más se verán durante este año. Se define como el claro competidor al rubio platino, que se había impuesto en los salones de peluquería durante estos últimos años.

Al parecer, el Mustard Hair es ya tendencia en Instagram, pues se trata de una coloración fuerte, llamativa e sorprendente. Un color que se vuelve más cálido, un rubio que tira sin complejos al anaranjado o amarillo hasta conseguir un intenso tono mostaza. El color opuesto al platino está de moda.

Lorena Martínez, estilista de Divinité Salón, explica las claves para lucir la coloración capilar del momento. Por ejemplo, aconseja combinar el amarillo mostaza con notas amarronadas y tonos jengibre para que sea más fácil de lucir con cualquier tono y tipo de piel. Y para obtener el color mostaza perfecto, "lo mejor es mezclar un poco con naranja ya que solo amarillo puede tornarse demasiado verdoso o demasiado neón", comenta.

Este color de cabello requiere de cuidados específicos para mantener su tono vibrante. "Es importante escoger productos capilares adecuados para la nueva coloración y apostar por tratamientos hidratantes, nutritivos y reavivadores del color".

Si no nos atrevemos con un total look mostaza en toda la melena, "podemos probar con algunos reflejos o incluso solo en las puntas, como si fueran unas bonitas californianas".

Divinité Salón apuesta por la peluquería orgánica y por conseguir, recuperar y mantener el estado de pureza del cabello. Gracias a la utilización de productos orgánicos no tóxicos, crean técnicas innovadoras tanto en su aplicación como en tratamientos personalizados.

Bajo la profesionalidad de sus estilistas, aplican tratamientos naturales para el cabello, pensados para cada situación. Luego de un diagnóstico capilar, totalmente gratuito, asesoran sobre el tratamiento más adecuado para el cabello.









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