Kershaw se dio cuenta de que no existían aplicaciones para los amantes de las barbas. De modo que, durante un viaje en tren surgió la idea de diseñar un software de este tipo, al que bautizó como Bristlr. Y antes de que acabase el día, abrió una página de registro. Si más de 100 personas se daban de alta en el portal, el proyecto se haría realidad.
A día de hoy, además de dar soporte a 'Bristlr', Kershaw estudia programar otra aplicación similar que ponga en contacto a personas tatuadas.Únicamente 80 internautas se registraron. Aun así, la cifra se aproximaba al objetivo propuesto. De ahí que la idea de este software peculiar viera la luz. Las dos primeras semanas Bristlr funcionaba a través de un prototipo terrible, en opinión de Kershaw. Así pues, decidió impulsar el proyecto a través de las webs Reddit y Product Hunt, aunque los resultados no fueron los esperados.
Más de 30.000 inscritos
Sin embargo, la iniciativa llamó la atención de algunos blogs de importancia. Estos blogs empezaron a publicar contenidos al respecto. Tres meses después de su puesta en marcha, más de 30.000 individuos se habían inscrito. Con el tiempo, la aplicación fue a más. De hecho, Kershaw se puso en contacto con la impulsora de startups, Ignite, con aplicación para web y dispositivo físico integrado vía smartphone, a fin de obtener apoyo, sobre todo económico, para Bristlr. La app ya se puede hallar en iOS y Android.
A día de hoy, además de dar soporte a Bristlr, Kershaw ya tiene en mente otros proyectos. Y estudia programar otra aplicación similar que ponga en contacto a personas tatuadas. En la actualidad, Bristlr cuenta con más de 100.000 suscriptores. La app está abierta a todos los géneros y orientaciones sexuales del planeta, tal y como anuncian en su página web.