"Ahora no es el momento de
pensar en lo que tienes.
Piensa en lo que puedes hacer
con lo que hay".
Ernest Hemingway, novelista, escritor
y periodista. Premio Pulitzer y Nobel
de Literatura (1899-1961).
Que la belleza profesional es una puerta abierta a la peluquería, es un hecho que algunos no ven. Hace escasas fechas, publicábamos un interesante artículo en nuestras páginas acerca del Microneedling, la última y revolucionaria técnica de regeneración capilar que entra en el salón de peluquería y que mueve a miles de seguidores en las redes.
Pero ¿cuántos empresarios o dueños de salones se deciden por incorporar técnicas punteras de la estética a su servicio o firman acuerdos de colaboración con centros y clínicas de medicina estética con las que contar y a las que dirigir a sus clientes en determinadas ocasiones?
El debate, una vez más, queda abierto. ¿Es el profesional peluquero sólo un peinador de cabellos o también busca, promociona y potencia su profesión y quehacer diario? Convertirse en prescriptor y liderar tratamientos en vanguardia para la salud y belleza capilar podría ser una de sus principales tareas. Una ventana abierta a la expansión y al negocio. Si no, también nos resta, solo teñir, cortar y peinar, las bases de este noble oficio, por supuesto, pero el cual se vería enriquecido y prestigiado si se apostara por la raíz de su propia naturaleza que no es otra, reiteramos, que la salud y la belleza del pelo, eso sí, desde vertientes distintas.
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