Los estilistas de Llongueras cuentan con diversas técnicas exclusivas para reavivar el cabello. Una de estas es el Free Hands, una técnica exclusiva, con la que trabajan el color en cabellos cortos.

Se trata de un fundido de color perfecto para cabellos cortos en el que no existen los cortes bruscos y lo que se busca es conseguir un efecto degrado en puntas. Es decir, no se aprecia dónde acaba y empieza la coloración.

Esto crea un efecto similar al de una mecha californiana, pero más natural y degradado. Mientras que si se prefiere una gran diferencia de color entre la raíz y la punta, entonces es mejor realizar un ombré, según explican los estilistas de Llongueras.

El proceso artesanal de la técnica 'Free Hands' es en cierto modo su principal ventaja, la separación manual de mechas y la aplicación individual con pincel, hacen que la mezcla de colores sea un abanico infinito de tonalidades.

No es para todo tipo de cabello. La técnica del Free Hands solo puede realizarse en cabellos cortos, cortos crecidos o zonas puntuales de un tupé siempre y cuando tengan más de 4 cm.

En su versión actual, los estilistas cardan muchísimo las raíces para que al poner la coloración en las puntas se vea un degradado. Luego, se aplica laca en el cabello y se seca con el secador para crear una base sólida de peinado.

Posteriormente, el estilista de Llongueras comienza a trabajar con las palmas de las manos. Luego las unta con tinte mientras realiza movimientos circulares. El resultado es espléndido.









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