Antes de realizar cualquier tratamiento o servicio en una peluquería, es importante que el profesional analice de manera exhaustiva la cabeza de su cliente para detectar posibles problemas tanto en el pelo como en el cuero cabelludo: sensibilidad, exceso de sebo, sequedad, caída del cabello, baja densidad, caspa pelo quebradizo, etc.

A menudo esta tarea es complicada, ya sea por tratamientos o coloraciones anteriores, pero la cámara de diagnóstico capilar de Kérastase la facilita en gran medida. Esta herramienta toma fotografías del pelo y el cuero cabelludo muy ampliadas, a color y en alta definición, lo que permite detectar características que podrían pasarse por alto a simple vista.

Además, también es una gran ayuda como método de seguimiento, ya que permite hacer comparativas detalladas del estado del cabello al inicio, durante y al final de los tratamientos. De esta manera la calidad de los servicios aumenta y la atención al cliente es mucho más personalizada.









Recomendamos